De nuevo, Evelyn

Las calles se van vaciando lentamente. Las luces de las farolas comienzan a ser la única iluminación de una ciudad que ya conozco bién. Solo una calle me separa de casa. Solo una calle. Si la recorro ahora llego a un lugar donde me siento segura. Sin embargo, miro a mi derecha y se que un simple paseo me separa de algo que quiero. El móvil me quema aun en el bolsillo. Un mensaje que me llegó hace ya unas 7 horas . Son las 22.40. Respiro hondo. Aún tengo las llaves en mi mano pero no voy a ir a casa.No hasta dentro de un rato.

Sonrio y giro a la derecha. En el fondo sabia lo que iba a hacer. No podia dejarlo tirado así. A el no, nunca a él. Camino rapido, casi corriendo. La estación no queda lejos y seguro que está a punto de llegar. Por raro que parezca las calles están vacias del todo, sera por el frio o seré yo que no quiero ver a nadie más. Ya casi corro aunque se que llego a tiempo ¿ o no? . Puede que no llegue a tiempo, como siempre. Puede que como siempre no llegue en el momento correcto, que halla visto que no fui a por el y se halla cogido el bus de vuelta. Me quedo parada a solo una calle. Las 22.50. El bus de vuelta sale en 10 min, seguro que va a cogerlo. Mira el poco camino que me queda, pero no me muevo. Saco mi movil del bolsillo, y leo de nuevo el mensaje " Voy hacia donde estes tu , ve por mi por favor " Suspiro, solo un porfavor, nada mas. A alguien distinto habria pedido un poco más de explicación, no mucho mas. Pero si algo más.

Sin embargo, eso es lo que hay. Guardo el móvil . Por mucho daño que me haga el ir es mucho mas el bién que me hará verle, ver su sonrisa y sentirme como volver a casa.Aunque solo sera por unas horas. Camino de nuevo hacia la estación, entro en ella y le busco con la mirada . No le veo. Pero tampoco hay ningún autobús  no se ha podido ir.Pero no, alli está . Mirando hacia las puertas . Salgo a correr discretamente hacia el. Grito su nombre en susurros, me escucha y sonríe  Le abrazo y siento que todo debe ser así. Porque mi cuerpo no entiende que no es normal tenerle a mi lado. Mi cuerpo no entiende que es extraño tenerle cerca.

Pero sin embargo, me siento como en casa. Como si todo debiera ser así.